Conversión de la luz

La conversión de la luz describe el proceso por el cual la luz se convierte de una forma de energía a otra. Lo más habitual es convertir la energía eléctrica en energía luminosa, como en las lámparas incandescentes, los LED o los tubos fluorescentes. A la inversa, la energía luminosa puede convertirse en energía eléctrica, por ejemplo en los módulos solares que utilizan la energía fotovoltaica para convertir la luz solar en electricidad.

Otro aspecto de la conversión de la luz es el cambio de su longitud de onda, por ejemplo mediante el uso de fósforo en los LED, que convierte la luz azul de onda corta en luz blanca cálida de onda más larga. Estos procesos son esenciales para muchas tecnologías, desde los sistemas de iluminación y las pantallas hasta los dispositivos de generación de energía. La conversión de la luz también desempeña un papel en la naturaleza, por ejemplo en la fotosíntesis, donde la energía luminosa se convierte en energía química. La eficiencia y el control de esta conversión es un área clave de la ciencia y la tecnología para desarrollar soluciones sostenibles e innovadoras.