Toma de corriente

Una toma de corriente es el punto en el que los cables de alimentación salen de la pared o el techo y se puede conectar una luz. Otro término para esta toma de corriente es punto focal. Este punto es, por lo tanto, el principio y el fin de cualquier sistema de iluminación, porque sin él no habría energía para las luminarias y, por lo tanto, no habría luz.

La palabra "punto focal" para la toma de corriente es un término algo anticuado y tiene su origen en los primeros tiempos, cuando las lámparas todavía funcionaban con aceite o parafina o se utilizaban velas de verdad. Por punto de luz se entendía literalmente, ya que se refería al lugar de la pared donde realmente ardía la luz. Hace tiempo que las lámparas funcionan con electricidad, pero el término ha sobrevivido.

Como la toma de corriente es importante para el suministro eléctrico, pero no especialmente atractiva, existen las llamadas marquesinas o rosetones de techo. Éstas ocultan completamente la toma de corriente y, de este modo, no sólo mejoran el aspecto, sino que también garantizan una mayor seguridad. La toma de corriente queda protegida por la conexión del cable a la luminaria y ya no existe riesgo de descarga eléctrica.